Cuando pensamos en acudir al dentista seguro que es por un dolor de muelas, o porque esa incómoda muela del juicio nos está dando problemas al salir, incluso porque queremos mejorar la estética de nuestra sonrisa con un blanqueamiento o un tratamiento de ortodoncia. Sin embargo, muchas veces no reparamos en nuestras encías y en que es posible que necesitemos un tratamiento de periodoncia.
Por cuestiones genéticas, por malos hábitos como el tabaquismo, por una mala higiene continuada en el tiempo… son muchos los factores que influyen en el estado de nuestras encías y una visita a tiempo a nuestro dentista puede evitar males mayores.
Los dientes se insertan en el hueso alveolar de los maxilares, que se recubren por la mucosa o encías. Entre estas y el hueso se deposita alimentos que, si no eliminamos bien, se calcifican y constituyen el sarro. Esto provoca hinchazón y sangrado y afecta al ligamento periodontal, pieza clave en la sujeción del diente. Si no tratamos la gingivitis, esta pasará a periodontitis y nuestras piezas dentales correrán peligro.
Por eso, lo mejor es hacer una visita al menos una vez al mes a tu clínica de periodoncia en Sevilla, sobre todo si ya pasas los 50, y asegurarte del correcto estado de tus encías. Tu sonrisa lo agradecerá.