El verano es la época preferida por los peques de la casa. Se acabaron las clases hasta septiembre, ya no hay por qué madrugar a diario, tienen más tiempo para jugar y ver la tele y, además, es el momento de los chapuzones y los largos días de juego en la playa o la piscina.
Y, la verdad, es un fastidio cuando sufren un accidente y al llegar el verano tienen que soportar la incomodidad de una escayola. Gracias a la escayola impermeable, un innovador diseño de un centro de traumatología infantil en Sevilla, esto ya no será un problema.
Más ligera y cómoda, la escayola sumergible es la mejor aliada de los peques, que podrán disfrutar sin miedo y como cualquier otro niño de las ansiadas vacaciones. Es un invento pensado para ellos, pero del que los mayores también se beneficias, al ver cómo los pequeños continúan su día a día con normalidad y sin que nada les frene.