En la oficina se consume mucha agua porque nos ayuda a superar el día de trabajo en mejores condiciones y más hidratados. Estar hidratado es uno de los requisitos para tener una mente más creativa y estar más activos. Por ello, es indispensable tener una máquina de agua ionizada en la oficina. Esta aporta grandes beneficios a nuestra salud y al medio ambiente, al no conseguirse mediantes los procesos que conocíamos anteriormente. En el caso de no querer estar dando paseos hasta la máquina, una solución más cómoda es llevar una jarra de agua ionizada hasta la mesa y así cada vez que queramos servirla en el propio vaso. Esta experiencia ya no te hará pensar en traer una botella de plástico, que deja su sabor en el agua, además de estar reduciendo los residuos contaminantes como las botellas de agua de plástico.
