Durante el embarazo y especialmente en el primer trimestre se producen cambios hormonales que afectan a la piel. Como resultado de ellos aparecen estrías, varices, celulitis y manchas. Aunque la mayoría de estos cambios desaparece tras el parto, es conveniente cuidar la piel durante todo el periodo de gestación.
1. Mantener la higiene de la piel
Para mantener la higiene es recomendable emplear jabones neutros y geles cremosos, por ejemplo un gel de rosa mosqueta en crema u otra sustancia que contribuya a la hidratación de la piel. Las duchas con agua templada son preferibles a los baños calientes. No se aconsejan los cambios bruscos de temperatura en el agua.
2. Prevenir las estrías
Entre el 70% y el 90% de las mujeres desarrollan estrías durante los últimos meses del embarazo. Se trata de lesiones de la piel producto de la ruptura de las fibras de colágeno y elastina de la dermis. Las estrías son irreversibles por lo que es muy importante prevenirlas. Para ello aconsejamos lo siguiente:
- Beber dos litros de agua al día
- Aumentar el peso de manera controlada
- Hidratar frecuentemente la piel de las zonas más propensas a las estrías (muslos, caderas, vientre, abdomen, senos y cara interna de los brazos) con cremas corporales hidratantes o específicas antiestrías unas dos veces al día mediante masajes suaves para mantener la elasticidad de la piel y aumentar la circulación.
3. Evitar manchas en la piel
Son también muy habituales durante el embarazo las manchas en la piel de la cara. Se trata de manchas irregulares de color marrón de tipo hereditario y hormonal desencadenadas por la exposición al sol. Por este motivo, y aunque en muchos casos no pueda prevenirse su aparición, es aconsejable utilizar protección solar completa sin alcohol (SPF 50+).
4. Combatir la celulitis
La celulitis se manifiesta en la aparición de grasa en algunas zonas del cuerpo. Para prevenir el problema es recomendable cuidar la dieta, caminar a diario y favorecer la circulación mediante masajes, chorros de agua fría y el uso de ropa amplia.
Las cremas anticelulíticas no son aconsejables durante el embarazo. En su lugar, puedes aplicar en tu piel, mediante suaves masajes, cremas hidratantes, como las de la línea urea del Instituto Español.